El cada vez más abierto mundo del Internet en Guatemala hace habituales prácticas desconocidas hasta hace unos años, mientras la generación de la informática es vista con cierto recelo por el resto de la sociedad.
Según especialistas, con la irrupción de las tecnologías de la información ha nacido la primera generación cibernética en países con históricos rezagos sociales, económicos y culturales como Guatemala.
La irrefrenable expansión de los teléfonos móviles, desde su llegada al país hace apenas unos 15 años, ha generado un uso masivo de la tecnología, en especial de jóvenes y adolescentes que han crecido con los notables avances de la informática, como el asombroso Internet.
Guatemala, con alrededor de 13 millones de habitantes, es el mayor mercado de Centroamérica para las compañías de telefonía móvil al registrar más de cuatro millones de usuarios de aparatos celulares.
Fuentes de la industria de la telefonía celular indicaron que Centroamérica, con un potencial de 30 millones de clientes, presenta un inusitado crecimiento al pasar de índices de cinco por ciento al 30 por ciento en los últimos cinco años.
Facebook, Hi5, blog, chat, navegación en la red, myspace, ciberespacio son términos habituales para los representantes de la nueva generación y parte de las herramientas tecnológicas ahora masivas que eran desconocidas hasta hace poco más de una década.
En Guatemala cada vez es mayor el acceso al servicio de Internet, luego de años en que la gran mayoría de la población carecía de una computadora y en general del acceso a los adelantos informáticos.
Tras comenzar el despegue, la tendencia a crecer no se ha perdido, pero “falta mucho por hacer” para que el grueso de la población tenga Internet, dijo a Notimex Erick Sosa, especialista en soluciones tecnológicas de la multinacional Microsoft para Centroamérica.
Indicó que un estudio reveló que en Guatemala se registró un crecimiento de casi 300 por ciento de la población que usa Internet en tres años, al pasar de 250 mil a 750 mil personas, y se estima que se llegará a casi el millón de usuarios al finalizar este 2008.
La profesora Glenda Mazariegos, directora del área de computación de un colegio privado capitalino, señaló que “se ha vuelto una costumbre” que los alumnos recurran al servicio de Internet para preparar sus clases y elaborar sus tareas.
Aplaudió el hecho de que los alumnos sepan manejar la tecnología pero lamentó que dediquen cada vez más tiempo al Internet para cumplir sus tareas y dejen los libros, las investigaciones documentales, visitas a bibliotecas y museos como parte esencial de su formación académica.
“A pesar de que es un avance tecnológico, a la larga perjudicaría a los estudiantes en su adecuada formación académica”, dijo.
Agregó que “la facilidad que tienen los alumnos para el uso del internet y el uso indiscriminado de esta tecnología en sus tareas y en sus vidas disminuirá su preparación”, sostuvo.
La joven universitaria Renata Archila, una entusiasta integrante de un club capitalino de cibernautas, expresó que un usuario “experimentado” encuentra “cualquier cosa, entabla amistades, se divierte y aprende al viajar por el mundo del internet”.
“Las posibilidades son ilimitadas para el asiduo a la red, casi siempre jóvenes y adolescentes, que descargan libros, crean espacios personales, intercambian información con personas en otros países y continentes”, señaló Archila.
“Cada cibernauta es responsables del uso de la red” y de su decisión de ingresar a páginas especializadas en “temas escabrosos” como satanismo, pornografía, prácticas de terrorismo, manejo de armas.
“Esto queda en la conciencia y aficiones de cada quien”, puntualizó. El chileno Alfredo Rojas, especialista de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), consideró que la falta de infraestructura y el alto costo del Internet en la región no impide el interés de la población por la tecnología.
“Los jóvenes, principalmente, se las arreglan. Buscan café-internet, los llenan. Estas limitaciones no pueden parar el interés por esta nueva tecnología”, dijo el Oficial de Programas de la Oficina Regional de Educación para América Latina y el Caribe de Unesco.
El acceso a la informática no es privativo de las personas de clase media latinoamericana, “todos los jóvenes están llegando cada vez más a la carretera de la información, al campo del internet. Todos tienen celulares, y eso ya es uso de alta tecnología”, enfatizó el experto.
En Guatemala, al parecer están dadas las condiciones mínimas para el acceso de la población a la tecnología, “siempre y cuando se tenga un ingreso medio, en el mercado existen varias opciones a precios razonables”, según un ejecutivo de una empresa telefónica.
Mencionó la facilidad de adquirir celulares de última generación a 400 dólares en promedio con facilidades de pago, café Internet con precios desde 54 centavos de dólar la hora y servicios de Internet residencial y otras áreas informáticas con costos de 70 dólares mensuales.
Las tiendas especializadas, con artículos a precios desproporcionados en relación con los salarios mínimos de los guatemaltecos de 180 dólares al mes, ofrecen lo último de la generación Wii (540 dólares), video juegos (100 dólares), Touch y Flash Focus -ejercicios y baile-
(250 dólares).