La sentencia más inhumana realizó un tribunal paquistaní, condenó a muerte por primera vez a una mujer cristiana, madre de cinco hijos, por blasfemar contra Mahoma, una sentencia que provocó las protestas de varias asociaciones.
La sentencia en contra Asia Bibi, de 45 años, fue hecha pública por un tribunal de Nankana, distrito de la provincia central del Pendjab, a unos 75 kilómetros al oeste de Lahore, capital cultural de la República Islámica de Pakistán.
Según las indagaciones el caso se remonta a junio del pasado año, cuando varias mujeres musulmanas que trabajaban con Asia Bibi, fueron a ver a un responsable religioso y la acusaron de proferir blasfemias contra el profeta Mahoma. El mulá denunció los hechos a la Policía, que abrió una investigación.
Asia Bibi fue detenida y procesada por violar el artículo 295 C del Código Penal paquistaní que prevé la pena de muerte en estos casos.
Naveed Iqbal, juez, condenó a la horca a Bibi, al considerar que la acusada no tenía “ninguna circunstancia atenuante” y descartar “totalmente” que fuese acusada en falso, según el veredicto del que la AFP obtuvo una copia.
Para que sea completada la condena falta que sea aprobada por el Alto Tribunal de Lahore, la más alta jurisdicción del Pendjab. Sin embargo el marido de Asia Bibi, Ashiq Masih, de 51 años, estimó que ningún elemento justificaba esta condena y anunció a la AFP que apelará la decisión del tribunal.
Las asociaciones de Derechos Humanos, dicen que es la primera vez que se condena a muerte a una mujer en Pakistán por blasfemar y denunciaron que esta sentencia saca de nuevo a la luz la controvertida legislación en esta materia. Por lo que reclamaron la abolición de esta legislación, porque puede utilizarse con fines personales y alientan el extremismo islámico en un país con un 97% de población musulmana.
El pasado mes de julio, dos hermanos cristianos acusados de haber escrito un panfleto crítico con Mahoma, fueron asesinados delante de un tribunal en Pendjab, donde cientos de manifestantes pedían su condena a muerte.
El marido de Asia ha sido incapaz de decirles a sus hijos la pena a muerte que le han impuesto a su madre. “Mis hijos me preguntan por su madre, pero yo no he tenido el coraje de decirle que ella está castigada a morir por un delito que nunca a cometido”, ha afirmado Ashiq Masih, en declaraciones al diario The Telegraph.