NOTICIACRISTIANA.COM.- Un pequeño pueblo de Wyoming está lidiando con el dolor y la ira después de que una madre que luchaba con problemas de salud mental matara a tres de sus cuatro hijas antes de dispararse en la cabeza el lunes.
Las autoridades identificaron a la madre como Tranyelle Harshman, de 32 años. Las hijas fallecidas son Brooke (3 años), Jordan (2 años) y Brailey Blackmer (9 años). Olivia, la hermana de Brailey de 7 años, sobrevivió al ataque.
El lunes, alrededor de la 1:30 p.m., Tranyelle llamó a la policía informando que se habían producido disparos en su casa y que sus hijas habían sido heridas.
Durante la llamada, dijo que creía que dos de las niñas estaban en sus cunas en el piso de arriba y que las otras dos estaban en una habitación compartida en la planta baja. También mencionó que planeaba suicidarse. A pesar de los intentos del despachador de mantenerla en la línea, Tranyelle colgó.
Llegada de la policía
Pocos minutos después de la llamada, las autoridades entraron en la casa de la madre y encontraron a las niñas. Dos niñas, de 2 y 9 años, estaban muertas con heridas de bala en la cabeza, mientras que otras dos niñas, de 2 y 7 años, aún estaban vivas pero heridas de bala en la cabeza.
La madre también fue encontrada con signos de vida y una herida de bala en la cabeza. A pesar de los esfuerzos de los policías, la niña de 2 años falleció.
Tranyelle y Olivia fueron trasladadas al hospital para recibir tratamiento. La madre falleció el martes por la noche, mientras que Olivia sigue siendo tratada en el Hospital de Salt Lake City en Utah.
Quinn Blackmer, exesposo de Tranyelle y padre de Brailey y Olivia, explicó que había estado luchando por la custodia total de sus hijas durante los últimos cuatro años. Aunque temía que algo malo pudiera suceder, nunca imaginó esta tragedia.
Los médicos tienen esperanzas en la recuperación de Olivia, pero si su cerebro sigue hinchado, es posible que tengan que inducirle un coma.
Problemas de salud mental de la madre
Quinn, miembro de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, ha estado cantando a Olivia en el hospital. Pide al mundo que ore por su hija, ya que es lo único que le queda. Quinn recuerda a Brailey como una niña sonriente, dulce e inteligente que no merecía esta tragedia.
Cliff Harshman, el viudo de Tranyelle, pidió al público no juzgarla severamente. Explicó que su esposa estaba siendo tratada por trastorno de estrés postraumático, depresión postparto y depresión general. Cliff destacó que la salud mental no es solo una cuestión de fuerza de voluntad, sino también de desequilibrios químicos en el cerebro.
Campañas de ayuda
Se han creado campañas en GoFundMe para ayudar a las familias de ambos padres a enfrentar esta trágica situación. Cliff, aunque pide compasión por su esposa fallecida, está luchando con la ira por la decisión que ella tomó.
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