NOTICIACRISTIANA.COM.- El pastor Humberto Miguez, líder de la Iglesia Evangélica Crescendo en Cristo (IECC) en Itaquera, São Paulo, Brasil, está siendo investigado por la Policía Civil tras múltiples denuncias de acoso sexual.
Según la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), el caso está bajo secreto de justicia y es llevado por la 7ª Delegacia de Defesa de la Mujer (DDM).
«El sospechoso fue oído y prestó esclarecimientos. Más detalles serán preservados para garantizar la autonomía al andamento de los trabajos», informó la SSP.
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Modus operandi
Al menos siete mujeres han registrado denuncias formales, aunque se estima que el número de víctimas podría oscilar entre 25 y 40, incluyendo adolescentes y ancianas. Los hechos habrían ocurrido entre 2010 y 2024. Según los testimonios, el pastor contactaba a las mujeres por Facebook, generalmente por la noche, iniciando conversaciones con elogios y comentarios de connotación sexual.
En una de las denuncias, una víctima relató que el pastor le preguntó si usaba ropa interior tipo hilo dental durante el culto y le sugirió cambiar a prendas más grandes. En otro caso, cuestionó a una mujer sobre su vida sexual tras separarse de su esposo, preguntándole si su exmarido la satisfacía.
La supuesta «unción»
Miguez también ofrecía «ungir partes íntimas» de algunas fieles, argumentando que esto ayudaría a «romper maldiciones» derivadas de infidelidades en sus matrimonios. Una víctima declaró que el pastor le dijo:
«Solo así podrás recomenzar, eliminando toda contaminación que tu esposo trajo.»
En otro caso, cuando una mujer rechazó la «unción», el pastor le preguntó si era porque sentía «miedo de sentir placer, por estar con falta de relación [sexual]».
Mensajes comprometedores
Las denuncias se fortalecieron con mensajes intercambiados entre el pastor y las víctimas, en los que él mismo admitía su conducta. En algunos casos, exigía que las mujeres borraran las conversaciones para evitar que sus esposos descubrieran el contenido.
Cuando una mujer regresó a la iglesia después de una separación temporal, el pastor la abordó con la frase:
«Diste mucho y diste bien».
Reacciones y consecuencias
Desde que las acusaciones salieron a la luz, Miguez ha sido apartado del púlpito, aunque seguía asistiendo a la iglesia hasta hace poco. Su hija habría intentado minimizar las denuncias, enviando mensajes a las víctimas en los que afirmaba que: «Dios hará lo que tiene que hacer» y que la «consecuencia natural es la eternidad en el infierno».
El pastor no ha respondido a las acusaciones y su defensa no ha sido localizada, informó el portal Metropoles.
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