NOTICIACRISTIANA.COM.- La disminución de creyentes en Alemania ha llevado a comunidades católicas y protestantes a replantear el uso de sus templos. Muchos edificios, especialmente los más antiguos, implican costos de mantenimiento cercanos a 26,500 euros (27,825 USD) anuales. Con la baja asistencia a los cultos, varios espacios están siendo reutilizados para actividades seculares como deportes, cultura y eventos nocturnos.
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Menos culto, más usos compartidos
La Iglesia Evangélica en Alemania Central (EKM) reconoció que “ya no necesitamos la mitad de las iglesias” y que deben buscar nuevos usos. Según la historiadora del arte Stefanie Lieb, “de cada diez iglesias, cuatro o cinco ya no se utilizan exclusivamente para la práctica religiosa”, reflejando una tendencia creciente de secularización funcional.
Algunos casos ilustran esta transformación: en Bad Orb, una iglesia católica fue convertida en centro de escalada infantil con una inversión de 500,000 euros (525,000 USD); en Limburg, una capilla se transformó en restaurante. En Berlín, la iglesia Heilig-Kreuz acoge cafés, espectáculos y noches de DJ, mientras que St. Thomas ha sido sede de raves. Incluso en España, el templo de Santa Bárbara se convirtió en pista de skate.
La secularización no es la única respuesta. En regiones como Oberpfalz, católicos y protestantes comparten templos en al menos 51 casos. También hay cesiones a comunidades ortodoxas. Sin embargo, muchos edificios están protegidos como patrimonio histórico, lo que impide su demolición o modificación, limitando su venta o reforma.
Presión financiera en Alemania
En los años 90, había 57 millones de cristianos en Alemania; hoy son poco más de 37 millones. Se estima que en 2060 serán apenas 23 millones. Como el financiamiento depende del impuesto eclesiástico (Kirchensteuer), que representa entre el 8% y 9% del ingreso de cada fiel registrado, la reducción de contribuyentes ha forzado a las iglesias a buscar nuevos usos y alianzas interconfesionales.
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