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Matan a reconocido cantante gospel; su hijo es principal sospechoso

Matan a reconocido cantante gospel su hijo es principal sospechoso
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NOTICIACRISTIANA.COM.- El mundo de la música cristiana y gospel está de luto tras la muerte del cantante Jubilant Sykes, un barítono de 71 años reconocido internacionalmente por su voz y su fe. El artista fue hallado sin vida en su casa de Santa Mónica, California, tras sufrir un ataque con arma blanca. La noticia ha conmocionado tanto a la comunidad musical como a las iglesias donde su ministerio dejó huella.


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Detalles del incidente

Según las autoridades locales, la policía acudió a la vivienda luego de una llamada de emergencia realizada por su esposa, Cecelia Sykes. Al llegar, encontraron al cantante gravemente herido y lo declararon muerto en el lugar. Su hijo, Micah Sykes, de 31 años, fue detenido en la misma residencia bajo sospecha de asesinato.

La Grace Community Church (iglesia que pastoreó John MacArthur), congregación a la que Sykes pertenecía desde 1978, lo recordó como “un amado hermano y miembro clave del ministerio musical”. En su comunicado destacaron que, aunque era conocido mundialmente por su voz, lo más valioso era su “humilde, constante fe” y su deseo de reflejar la belleza de Cristo en cada interpretación.

Trayectoria artística y espiritual

Nacido en Los Ángeles, Sykes se formó cantando en la iglesia y luego alcanzó escenarios como el Metropolitan Opera, Carnegie Hall y el Kennedy Center. Su versatilidad lo llevó a interpretar ópera, gospel, jazz y música clásica. En 2010 recibió una nominación al Grammy por su participación en la grabación de Mass de Leonard Bernstein, consolidando su prestigio como cantante cristiano con alcance global.

Además de su carrera artística, Sykes dedicó tiempo a la enseñanza, compartiendo su experiencia con jóvenes cantantes en la Universidad Estatal de California en Fullerton. La iglesia lo describió como alguien cuya vida “irradiaba el gozo de quien había probado la misericordia de Dios”. Hoy, su partida deja un vacío en la música cristiana y en la fe de quienes lo escucharon, pero también un legado de esperanza y gratitud.

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Foto extraída: TRR


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