¿Quién puede detener el progreso de los terroristas del Estado islámico? Los expertos señalan que la naturaleza puede ser la responsable de derrotar a los soldados a través de una enfermedad que puede borrarlos del mapa, según publica Yahoo News.
Siria e Irak son regiones vulnerables a la leishmaniasis, una enfermedad parasitaria que conduce a la muerte. Los primeros síntomas de la enfermedad son dolores, úlceras, fiebre, pérdida de peso, la destrucción del hígado y el bazo.
La leishmaniasis se transmite a través de insectos que se propagan rápidamente en zonas con malas condiciones higiénicas, dicen los expertos.
La situación de los terroristas es muy delicada en su sede en Raqq en Siria, porque hay muchos casos de enfermedad, cerca de 100.000 personas están infectadas.
La persona con leishmaniasis tiene pocas posibilidades de sobrevivir y los soldados no piden ayuda médica por lo que las posibilidades de curación son aún más mínimas.
Los lugares en que los grupos terroristas se asientan tienen pocas condiciones sanitarias básicas y esto sólo aumenta la propagación de la enfermedad.
Leishmaniasis puede acabar con el Estado Islámico en un corto período de tiempo, mostrándose superior a las obras de las grandes potencias mundiales que se han unido para tratar de destruirlos con misiles y tropas terrestres.