EE.UU.- Dos de las películas que se encuentran entre las más taquilleraS en la historia son: Frozen: Una aventura congelada (2013) y la Guerra de las Galaxias: Episodio VII – El Despertar de la Fuerza (2015).
Las secuencias planeadas para ser lanzadas en los próximos años están siendo blanco de campañas en Internet, promovidas por grupos LGBT. El objetivo es que ambas tengan entre los nuevos personajes, alguien que sea homosexual.
Frozen, de Disney es el diseño más exitoso de los dibujos animados. Una de sus ventajas es que la princesa Elsa no termina (como siempre) con un príncipe encantado. Por otra parte, el tema de su canción «Let it Go» se convirtió en una especie de «himno gay» entre los adolescentes estadounidenses.
Jonathan Groff, uno de sus principales animadores, es abiertamente homosexual. Sin embargo, fueron los grupos de activistas «pro-gay» los responsables de la campaña de #GivaElsaAGirlfriend [De una enamorada para Elsa].
El propósito de la presión en las redes sociales es hacer que la princesa “salga del armario de hielo” y revele ser una lesbiana en la animación, prevista para el año 2018. Una de las razones de esto es que los grupos de canales de Disney ya han incluido personajes gays en sus programas infantiles.
La presentación de nuevos personajes LGBT en otras películas de la saga Star Wars es también parte de esta campaña «inclusiva». La franquicia, que tiene un fuerte atractivo para los niños, ahora pertenece a Disney. Ella es el tema de una campaña muy amplia, coordinada por la organización «pro-gay» más grande en el mundo, GLAAD, con sede en los EE.UU.
El «manifiesto» que fue difundido por el grupo en Internet afirma que «a medida que los proyectos de ciencia ficción tienen una oportunidad especial para crear mundos únicos, cuyas sociedades avanzadas puede servir como un espejo de la nuestra, parece obvio que Disney pueda incluir personajes LGBT en la octava película ‘Star Wars'».
Otro argumento fuerte es que la séptima parte de la saga ha roto paradigmas al colocar como protagonistas a un negro y una mujer. La próxima «minoría», según GLAAD son los homosexuales y transexuales.
Esta es una tendencia cada vez mayor, ya que, entre los 126 principales estrenos de películas del año pasado, 22 de ellos (17,5%) muestran personajes LGBT.