PALESTINA. – El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, ha utilizado una serie de argumentos para tratar de justificar por qué los palestinos tienen el derecho a mantenerse en el territorio que pertenece a Israel.
Incluso siendo un musulmán, él usó la Biblia, más específicamente los pasajes del Antiguo Testamento para justificar lo que considera su derecho. Por lo que tiene un informe sobre el tema validándose con Génesis 21:34.
Sin embargo, a diferencia de los judíos, no hay evidencia de que los palestinos de hoy (árabes) sean descendientes directos de las personas mencionadas en la Biblia. Los filisteos, un antiguo pueblo enemigo de los descendientes de Jacob, vivían en esa parte del mundo, pero no tenían otra lengua u otra cultura.
Según los estudiosos, la famosa piedra de Rosetta, demuestra la existencia de los llamados Pueblos del Mar. La palabra «filisteo» tiene este sentido. Los estudios relativamente recientes sugieren que provenían de la isla griega de Creta y llegaron a Canaán alrededor de siglo 12 a.C. Se cree que dejaron de existir como pueblo en el siglo 7 a.C., cuando fueron desterrados por el rey Nabucodonosor de Babilonia.
El video que fue traducido por la organización Palestinian Media Watch, muestra a Abbas a hablando en dos ocasiones diferentes este año y con argumentos similares.
«Nuestra narrativa dice que hemos vivido en esta tierra desde antes de Abraham», dijo el presidente de la Autoridad Palestina.
«No soy yo quien está diciendo eso en la Biblia. La Biblia lo dice con estas palabras, que los palestinos existían antes de Abraham. Entonces, ¿por qué no se reconocen mi derecho?», dijo en un discurso público.
En otro video, filmado en su oficina, él habla de la prueba que él uso de un alfabeto cananeo-palestino utilizado «desde hace más de 6.000 años». Sin embargo, no hay evidencia histórica de que este lenguaje haya existido. El alfabeto cananeo data cerca 1.500 años a.C., una diferencia de 3.500 años en la cuenta de Abbas que no coincide.
Los registros históricos más fiables dan cuenta de que el pueblo árabe llegó por primera vez a la tierra de Judea con la invasión musulmana en el año 637 d.C. En otras palabras, mil años después de la desaparición de los filisteos bíblicos. Esta identidad moderna de los «palestinos» apareció por primera vez en el siglo 20.
Este argumento falso se ha repetido con otros líderes como Mahmoud al-Habbash, que es el presidente de Asuntos Religiosos e Islámicos de la Autoridad Palestina. La semana pasada, durante un sermón en una mezquita, llamó a los judíos «ladrones que robaron la tierra y que quieren robar la historia».
Él dijo: «Nuestros antepasados son monoteístas cananeos y jebuseos. Fueron ellos los que construyeron Jerusalén, antes de que Abraham existiese», dijo.
Por último, alegó que los ladrones judíos “afirman que había un templo aquí, pero éstas son acusaciones sin fundamento, mitos y rumores”. Tanto Abbas como al-Habbash utilizan estos argumentos contradiciendo un principio básico del islam, porque el Corán dice que los musulmanes son descendientes de Abraham a través de Ismael.
El objetivo es tratar de crear lazos históricos inexistentes con el territorio de Israel y especialmente con la capital Jerusalén que ha tenido un periodo de presión internacional por el reconocimiento de Palestina como una nación independiente y la división de Jerusalén como capital de ambos países.