El tribunal ha prohibido a la comunidad ultra-ortodoxa la utilización, venta y almacenaje de esta tecnología. Una corte de justicia ultra-ortodoxa ha prohibido a sus fieles usar los MP4, aparatos que considera “instrumentos del demonio para llevar a la gente a pecar”.
Los rabinos más conservadores han condenado el uso de los pequeños MP4, que ponen a disposición de cualquiera la posibilidad de ver y almacenar películas, un “vicio” que puede constituir un pecado.
El tribunal ha prohibido a la comunidad ultra-ortodoxa la utilización, venta y almacenaje de esta tecnología, y ha dado tres semanas a las tiendas para que se deshagan de sus existencias, informa hoy el diario “Yediot Aharonot” en su versión digital.
Dos pequeños comercios de Jerusalén, situados cerca del barrio de Meah Sharim, donde reside una amplia comunidad haredí (ultra-ortodoxa judía), no tendrán muchas existencias que retirar, ya que la pasada semana fueron atacadas por fanáticos judíos que rompieron sus escaparates, y destruyeron y quemaron sus pertenencias.
Desde hace ya algunos meses varios líderes religiosos judíos habían mostrado su firme oposición hacia los MP4, una tecnología cada vez más utilizada por sus fieles y que “pretende colarse en los hogares y las yeshivas (seminarios rabínicos) con el engaño de que con ella se pueden escuchar los versos de la Torá”.
Los distribuidores de estos instrumentos del demonio, según los rabinos “sólo buscan llevar a la población de Israel a pecar, a través de las películas y otras abominaciones”.
Muchos ultraortodoxos no tienen siquiera televisión en casa, no utilizan internet y evitan las nuevas tecnologías, instrumentos que dan pie a la tentación y pueden llevarles a incumplir los rígidos preceptos que rigen sus vidas.