NOTICIACRISTIANA.COM.- “Ante esto, caí a sus pies para adorarlo. Pero él me dijo: ‘¡No hagas eso! Soy consiervo tuyo y de tus hermanos y hermanas que mantienen el testimonio de Jesús. ¡Alaba a Dios! Porque es el Espíritu de profecía el que da testimonio de Jesús”, ( Apocalipsis 19:10 ).
El don de profecía existía en el Antiguo Testamento y continúa hasta el día de hoy. En el Antiguo Testamento, los profetas a menudo se dirigían a reyes y grupos de personas como un todo.
En el Nuevo Testamento, Juan el Bautista habló de la venida de Jesús y, por medio del Espíritu Santo, algunas personas aún hoy tienen el don de profecía. El apóstol Pablo escribió:
“Si dices ser profeta o piensas que eres espiritual, debes reconocer que lo que estoy diciendo es un mandato del mismo Señor. Pero si no reconoces esto, tú mismo no serás reconocido”. ( 1 Corintios 14:37-38 ).
La verdadera profecía de Dios está centrada en Cristo. Jesús es la Palabra Viva de Dios. Cuando podemos alinear la profecía con la verdad de la Palabra de Dios, podemos confiar en que es, de hecho, una palabra del Señor mismo.
¿Qué es la profecía y cuál es su significado en la Biblia?
“Con respecto a la venida de nuestro Señor Jesucristo y nuestra reunión con él, les pedimos, hermanos y hermanas, que no se inquieten o alarmen fácilmente por la enseñanza que supuestamente de nosotros, ya sea por una profecía o de boca en boca o por carta».
«Afirmar que el día del Señor ya ha llegado. No dejen que nadie los engañe en ninguna manera, porque no llegará ese día hasta que ocurra la rebelión y se manifieste el hombre del pecado, el hombre destinado a la destrucción”, ( 2 Tesalonicenses 2:1-3 ).
La profecía es una revelación. En el contexto de los versículos anteriores, es inspirado por el Espíritu. No todas las profecías son inspiradas por el Espíritu, razón por la cual tenemos la Palabra de Dios para responsabilizar a los profetas.
“Cualesquiera que sean las profecías que se dan hoy, no se suman a las Escrituras», explica el pastor John Piper. “Son probadas por las Escrituras. La Escritura es cerrada y definitiva; es una base, no un proceso de construcción”.
¿Es este un regalo que la gente todavía tiene hoy?
“¿Son todos apóstoles? ¿Son todos profetas? ¿Todos son profesores? ¿Todos hacen milagros? ( 1 Corintios 12:29 ).
La profecía es un don espiritual que la gente todavía tiene hoy. El Espíritu Santo puede hablar a través de las personas de manera profética, y siempre de acuerdo y alineación con la verdad de la Escritura.
Pablo escribió a los corintios acerca de la integridad del amor en el famoso capítulo “amor”, ( 1 Corintios 13 ). “La gente de Corinto estaba abusando de los dones espirituales, y Pablo se asegura de instruirles que el amor de Dios debe ser la motivación de cómo debe operar su poder», explica Britt Mooney.
La profecía, como cualquier otro don espiritual del Señor, no puede usarse aparte del Espíritu de Dios. Recuerde, los profetas siempre están destinados a señalar a las personas al Señor, Dios, el Único Dios Verdadero, a través de la Palabra Viva, el Hijo de Dios, Jesucristo.
Conclusión
La profecía es un regalo. No todos lo tienen, pero algunos ciertamente lo tienen incluso hasta el día de hoy. Cuando nuestra relación con el Señor es consistente, podemos caminar plenamente en los dones que Él nos ha dado.
La profecía nunca contradirá las Escrituras o el carácter de Dios. Se nos advierte que habrá muchos falsos profetas desde ahora hasta el tiempo en que Jesús regrese. Los falsos profetas pueden ser expuestos alineándolos con la verdad de la Palabra de Dios.
Escrito por: Meg Bucher en Crosswalk.
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