JOURNAL OF ARCHAEOLOGICAL SCIENCE.- Durante siglos, los judíos han tratado de probar la existencia del Templo de Salomón en Jerusalén. Para los científicos, no hay pruebas que comprueben los relatos del Antiguo Testamento. Para los musulmanes, que ahora controlan el lugar donde una vez estuvo el Templo, aseguran que sólo es un «mito» judío.
De hecho, no existen pruebas arqueológicas suficientes para demostrar la existencia de un rey llamado Salomón. Sin embargo, la revista científica Journal of Archaeological Science puede ayudar a cambiar eso.
Hace algunos años, los arqueólogos desenterraron un gran vertedero en las afueras de la antigua ciudad amurallada de Jerusalén. El proceso de datación comprobó que son el inicio del reinado de Herodes en el año 37 antes de Cristo, y la Gran Revuelta del año 66.
Aunque la mayoría de los antiguos vertederos de la ciudad tienen huesos de animales se encontraron una cantidad inusualmente grande para una sociedad agrícola, dijo un responsable del descubrimiento llamado Gideon Hartman, de la Universidad de Connecticut.
«La carne no se consumía diariamente. Obviamente, fue algo guardado para eventos especiales», dijo Hartman al sitio web LiveScience. Además, la mayoría de los animales eran más jóvenes, lo que sugiere que fueron criados para ser sacrificados.
El equipo de Hartman investigó cerca de 160 huesos de ovejas y cabras en su lugar con otras muestras de hueso de un vertedero. A través de un análisis de isótopos de nitrógeno y carbono en el material, es posible demostrar que vinieron de diferentes lugares y que fueron alimentados de maneras distintas.
El estudio encontró que muchos de estos animales procedían de los desiertos a cientos de kilómetros de las regiones de Jerusalén como Arabia y Transjordania. Esta información es consistente con los relatos bíblicos de las fiestas judías que tuvieron lugar en el Templo y atrajeron a judíos de todo el Oriente Medio.
Este hallazgo refuerza la idea de que Jerusalén era un centro de peregrinación constante. «Durante el tiempo del segundo templo había grandes cantidades judíos ricos que vivieron lejos de la tierra de Israel», dijo Hartman. Estas personas se sintieron obligados por la religión a sacrificar animales, algo que sólo se podía hacer en Jerusalén.
Hay varios registros históricos que muestran que Jerusalén era una metrópoli, pero carecían de los recursos económicos naturales. Según el Talmud, antiguo texto religioso judío, el corazón económico de la ciudad era el Santo Templo, donde los animales fueron sacrificados a Dios.
En los últimos años, una serie de hallazgos arqueológicos han confirmado muchos de los relatos bíblicos.
Ahora, el descubrimiento de estos huesos de animales refuerza a los judíos la idea de reconstruir el Templo de Salomón, un antiguo sueño de los ortodoxos que se fortalece cada vez más porque los relatos bíblicos están siendo probados científicamente.