Lanzada en el mercado en 2009, Bitcoin es una criptomoneda – moneda digital – controlada por una red peer-to-peer que no depende de bancos centrales. En este mercado, estimado en miles de millones de dólares, la porción del bitcoin es del 40%. En la estela de su éxito, más de 750 criptomonedas surgieron en la web.
Todas ellas tienen en común el hecho de realizar operaciones difíciles de ser rastreadas y pueden ser cambiadas por dinero en el «mundo real». Ahora surge la Christ Coin, dirigida a un público cristiano y que además de ofrecer oportunidades de inversión e ingresos para los consumidores, permite que sea utilizada para donaciones a iglesias, ONGs y misiones.
Citada por la organización Life Change, Christ Coin no es la primera moneda digital enfocada en un grupo religioso. Otros ejemplos son los BitCoen dirigido a judíos y donde el 5% de los beneficios van a Israel, y Onegram, para los musulmanes y enmarcado en la ley religiosa estricta de la sharia.
Los creadores de Christ Coin son empresarios cristianos. Ellos afirman que su misión de satisfacer las necesidades espirituales y financieras de cualquier interesado y ayudar a financiar el trabajo de las iglesias y ayudar a la comunidad cristiana global como un todo.
Las criptomoedas, también llamadas «tokens», ya son aceptadas como opción de pagos en diversos sitios. Los expertos creen que vinieron para quedarse. Christ Coin permitirá que los fieles compren o ganen esas «monedas», que además de ser usadas en compras, permite que las personas contribuyan a las iglesias o causas con las que se identifiquen.
Después del período inicial de financiación colectiva , cualquiera puede suscribirse a la plataforma de cambio de la vida y ser recompensados monetariamente por la interacción de varias maneras, incluyendo voluntarios, participar en pequeños grupos de estudio, la publicación de contenido o incluso la lectura de la Biblia.
Luke Forstmann, co-fundador de Christ Coin, explica. «Nos gusta pensar que con eso los cristianos pueden dejar su huella en el mundo, apoyar esfuerzos humanitarios, proteger su vida espiritual y obtener una renta adicional».
Para él, la moneda digital cristiana es «una oportunidad de inversión, pero que va más allá de las finanzas personales. Esperamos que esto cambie vidas, ministerios de apoyo e inspire a las personas a crecer en su fe.
Al igual que con las otras criptomedas, Christ Coin ofrecerá recompras trimestrales y libre comercio. Esto permite que la inversión siga creciendo y aumentar el valor de la moneda digital.
Para entender este prometedor mercado, sólo recuerda que el valor acumulado de Bitcoin en Brasil en los primeros ocho meses de 2017 alcanzó 390,6%, según los datos publicados en agosto el informe sobre un sitio bitvalor.com acompaña los precios en el mercado brasileño.
[ Fuente: Religion News ]