BIOBÍO, CHILE. – La Superintendencia de Educación confirmó la apertura de una investigación de oficio sobre el extraño hecho reportado este lunes (18) por el colegio Jahvé Nisi, ubicado en la comuna de Santa Juana, Región del Biobío, que atribuyó al Espíritu Santo una serie de desmayos de alumnos registrados durante un recreo.
«Investigamos, llamamos al establecimiento, pedimos información y vemos qué protocolos aplicaron. Y fundamentalmente lo que hacemos es ver qué impacto generó en la comunidad escolar», explicó el director regional de la Superintendencia, Luis Yévenes.
«Hasta el momento no hemos recibido ninguna denuncia del caso de niños afectados», aclaró, pero apuntó que «se creó un cierto trauma o inestabilidad en los chicos, por lo tanto, debe ser mitigada y reparada por el establecimiento educacional a través de los protocolos que ellos mismos han dado».
De acuerdo con el comunicado emitido por el colegio, «algunos alumnos de enseñanza media fueron tocados por el Espíritu Santo», lo cual ocurrió «en el primer recreo, (cuando) un grupo de alumnos pertenecientes a una iglesia, la congregación de la iglesia evangélica pentecostal, se agruparon y se manifestó el Espíritu Santo en ellos y realizaron una actividad espiritual».
Según contaron compañeros, estos alumnos comenzaron a saltar, gritar, a manifestar temblores e incluso hablar en una lengua extraña, para terminar en supuestos desmayos colectivos.
Según las autoridades del colegio no fue carencia de desayuno, ni deshidratación, ni calor, exceso de actividad física sino por la manifestación del Espíritu Santo.
El colegio es subvencionado, por lo que recibe fondos públicos, pero es evangélico. Su directora, Natalie Fernández, habló con el canal de TV local Amigos Penquistas y relató allí el fenómeno religioso que habría sucedido: “En el primer recreo, un grupo de alumnos de la Iglesia Evangélica Pentecostal se agruparon y se manifestó el Espíritu Santo en ellos”, dijo. Y el comportamiento habría sido, según sus propias palabras, de “movimientos estereotipados y palabras en lenguas extrañas”, tras lo cual se habrían desmayado.
“Es una actividad inusual en el ser humano. Es usual que se desmayen, pero no pierden la conciencia ni tienen daños físicos, no hay agresiones”, dijo Fernández, quien descarta que esto haya sido propiciado por el colegio o que se hayan usado drogas. “Estas situaciones se dan con regularidad en las iglesias evangélicas, por lo que no hay miedo ni temor, todo lo contrario, para nosotros es un verdadero milagro y alegría experimentar estas cosas con nuestros alumnos”, aseguró.
El hecho generó tal impacto en la comunidad. El colegio citó luego emitió un comunicado, en el cual decía que esto fue “una bendición”, que se permitió a los apoderados ir a ver a sus hijos, que no hubo alumnos dañados y que están trabajando en un protocolo para futuras “apariciones milagrosas”.
A raíz de las burlas que ha generado la situación en redes sociales, el establecimiento declaró que se debe a la ignorancia de la sociedad. “Lamentamos profundamente los comentarios y publicaciones de personas desinformadas o que no manejan temas espirituales propios de nuestra cultura”, dijeron desde la dirección del recinto.
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