A todo vapor irá la Iglesia Católica de México a través de las Asambleas Generales del CEM que después de año y medio de deliberaciones entre los obispos y sacerdotes, ha decidido frenar la fuga de sus feligreses. La estrategia: 1) Fortalecer la vocación sacerdotal. 2) Mostrar una Iglesia Católica más comprometida con los problemas de la comunidad.
Los integrantes de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) expresaron que: “Sólo cuando se redujeron las limosnas, la grey católica comenzó a preocuparse por los escándalos de padres pederastas y las iglesias vacías”.
En México las crisis económicas se han utilizado como pretexto para justificar el descenso de los feligreses de hasta un 30% en la cantidad de los diezmos. “Hubo muchos llamados a la unidad, pero sólo después de tres Asambleas Generales de la CEM se logró el consenso para fortalecer la fidelidad sacerdotal, a través de diversos métodos que van desde cursos vía Internet hasta presenciales”, afirmaron los del CEM.
La Iglesia Católica reconoce que había perdido el ímpetu evangelizador pero los arzobispos que están en cada región, como Norberto Rivera Carrera en la Ciudad de México, se encargaron de visitar vicaría por vicaría y, en algunos casos, iglesias que se encontraban abandonadas por los fieles han identificado el problema.
En diciembre del año pasado se abrió el sitio Web: www.elverdaderodiscipulo.org.mx, que ofrece diversos materiales y recursos multimedia a los sacerdotes para vivir “un verdadero discipulado cristiano”.
En noviembre del 2008, en el marco del Acuerdo Nacional por la Seguridad, la Justicia y la Legalidad, la iglesia católica mexicana se comprometió a influir en la prevención del delito y promotores de la paz y la seguridad.
“Formaremos un comité de laicos responsable de llevar un registro de las denuncias ante las instancias correspondientes con la finalidad de presionar a las autoridades para atiendan todas y cada una de las denuncias de la población mexicana”, aseguraron los miembros del CEM.