NOTICIACRISTIANA.COM- En Nicaragua la pandemia por el Covid-19 ha sido manejada totalmente diferente a la del resto de países del mundo. En esta nación centroamericana, en cierto modo se ha incentivado a la población a seguir su vida con normalidad.
Algunos medios reseñan que se motiva a la población a participar en actos públicos masivos como desfiles y manifestaciones.
Los nicaragüenses de una u otra forma han visto en este periodo de crisis una manera para aumentar su fe en las distintas denominaciones religiosas que se practican en el país con una manera diferente de sobrellavar la emergencia por el Covid-19.
En meses pasados, algunos lugares de culto decidieron cerrar las puertas para evitar el contagio de los fieles y asistentes.
Fue el caso de la Iglesia Evangélica Asambleas de Dios, que a través de un comunicado informó el cierre de los templos en las principales ciudades del país, cabeceras municipales y zonas fronterizas.
De igual forma, La Convención Bautista de Nicaragua anunció la suspensión de cultos y actividades en las iglesias por el riesgo de contagio de Covid-19.
Otras iglesias por el contrario, decidieron mantener sus puertas abiertas en medio de la emergencia sanitaria y las que en su momento cerraron ahora se preparan para reabrir y prestar sus servicios a los creyentes.
Reapertura
Al respecto, el pastor Augusto César Marenco, del Ministerio Apostolar Centro Cristiano dijo que en agosto se hará la apertura de las iglesias.
“No vamos a poder estar todo el tiempo metidos o encerrados, o aislados. Algunas congregaciones muy mínimas probablemente ni siquiera han cerrado nunca. Uno respeta las decisiones de los demás y se cometemos un error el tiempo lo va a decir y los efectos se van a sentir. Y creo que, aunque podría representar algún riesgo, creemos que es la decisión que se necesita en estos momentos”, señaló el líder evangélico.
Medidas
Explicó además, que una vez abierto los templos se determinaran una serie de medidas a cumplir para oficiar los servicios.
Como por ejemplo, no aceptar por el momento adultos mayores y niños, no permitir el ingreso de personas con padecimientos crónicos.
También establecer distanciamiento entre los asistentes y darles la opción a los pastores que no quieran abrir, para que permanezcan cerrados el tiempo que consideren prudente.
Exigirán el uso de mascarillas, lavado de manos y tomar la temperatura de los asistentes a los cultos. Probablemente los pastores reduzcan las horas de prédica.
“El resguardarse no es malo, tomar las medidas no es malo. La iglesia evangélica ha sido bastante responsable hemos llamado a la gente a un tiempo de resguardo, pero ya es tiempo, una vez que ha terminado consideramos que es necesario ya volver. Esta es una enfermedad con la que posiblemente vamos a convivir”, puntualizó.
La Alianza Evangélica Nicaragüense, ofreció datos aproximados de pastores y evangelistas que han fallecido entre el 12 de abril y el 15 de junio por causas del Covid-19.
Hasta la fecha del 17 de julio, el Observatorio Ciudadano Covid-19 en Nicaragua reportó un acumulado de 8.508 casos sospechosos y 2.397 muertes por neumonía o sospechosas de Covid-19.
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