GEORCIA, EE.UU.- Los líderes religiosos serán obligados participar en las bodas gay. El gobernador de Georgia, Nathan Deal, ha vetado una ley que permitiría a los líderes religiosos a no participar en bodas gay y proteger a las personas que se niegan a asistir a las mismas.
El republicano rechazó el proyecto de ley ayer lunes, diciendo: «He examinado las protecciones que este proyecto de ley propone para la comunidad de fe y no puedo encontrar ningún ejemplo de cualquiera de estas circunstancias que se produzcan en nuestro estado».
«No creo que tengamos que discriminar a nadie para proteger a la comunidad de fe en Georgia», añadió Deal. La mayoría de los republicanos aprobaron el proyecto de ley que protege a las personas en términos generales que actúan en su religión.
Las iglesias y grupos religiosos afiliados también podrían rechazar servir o contratar a alguien, basados en su fe. Sin embargo, Coca-Cola y otras marcas de renombre en Georgia se unieron a la NFL, a figuras de Hollywood prominentes y estudios de cine para instar el rechazo de la propuesta. Algunos amenazaron con boicotear al estado si no vetaba la ley por no discriminar bodas gay.
El mandatario dijo que su decisión de rechazar el proyecto de ley era «sobre el carácter de nuestro estado y el carácter de nuestro pueblo. Georgia es un estado que da la bienvenida a todos, está lleno de gente amorosa, amable y generosa».
Millones de dólares de por medio
Hollywood entró en acción. Disney, que es una de las compañías más gay friendly del mundo fue de los primeros y eso incluye a todos sus superhéroes de Marvel. También los hermanos Weinstein (grandes productores) y Netflix dijeron que no. También Fox, Univision, MGM, NBC/Universal y muchos más se pronunciaron en contra. Así que la ley iba a llegar a debatirse con este gran peso en su contra.
¿Por qué el gobernador de Georgia, Nathan Deal vetó la legislación antes de que eso ocurriera? Tal vez lo hizo porque le parecía discriminatorio y horrible. O porque le gusta mucho el mundo del entretenimiento, seguramente fue por los seis mil millones de dólares que esta industria inyecta al estado cada año debido a los extraordinarios incentivos fiscales que le ofrecen. Y no solo fue Hollywood, Apple y la NFL, por ejemplo, también estaban a bordo del boicot si semejante ley hubiera sido aprobada.