EE. UU.- El texto en cuestión era el fragmento de un antiguo del Evangelio según San Juan (probablemente Juan 1:50-51) escrito en griego antiguo y publicado en eBay a un precio inicial de $99, según el diario The New York Times.
El papiro —llamado «Papiro de Willoughby» por haber pertenecido a Harold Willoughby, profesor de la Universidad de Chicago, según la publicación en eBay— no se quedó ahí mucho tiempo.
El Dr. Geoffrey Smith, que investiga el cristianismo en la Universidad de Texas, entró en contacto con el vendedor y le preguntó si podía investigar el fragmento, informó el Times.
«Pensé: ‘no se puede dejar que esto desaparezca en eBay'», le declaró Smith al Times, «va a desaparecer en una colección privada».
Tras recibir el papiro, Smith presentó sus conclusiones la semana pasada en una conferencia en Atlanta. El papiro, que data de alrededor del 250 al 350 d.C., tiene el tamaño aproximado de una tarjeta de crédito y contiene unos seis versículos del Evangelio según San Juan.
El texto es único por estar escrito sobre una «hoja escolar sin usar en vez de un códice», que era la nueva tecnología de escritura de libros para los creyentes cristianos durante aquella época, informó el Times. También es único porque fue descubierto en internet, lo que según Smith es un indicio de los tiempos que corren.
Todavía hay muchas preguntas sobre el papiro, como de dónde proviene, cómo llegó a las manos de Willoughby y cuestiones sobre su validez.
El especialista en textos bíblicos Brice C. Jones escribió en una publicación de blog que hay algunos elementos confusos en relación al texto que lo hacen preguntarse por su autenticidad. Por ejemplo, al principio Jones notó que el papiro sólo estaba escrito de un lado del fragmento, lo que habría sido «muy extraño para un papiro del Nuevo Testamento en griego».
Mientras los investigadores siguen trabajando en el papiro descubierto recientemente, es importante recordar que fragmentos del Nuevo Testamento como este son extremadamente raros, según Christian Today. De hecho, existen solamente unos 130 manuscritos registrados de toda la historia mundial, informó Christian Today.