Nueva York.- Líderes religiosos de distintos credos refutaron la predicción de Harold Camping, quien aseguró que este 21 de mayo el mundo se acabará, luego de hacer una reinterpretación de la Biblia y analizar una serie de “señales” sobre el apocalipsis y encontrar la esta falso pronóstico.
Para líderes religiosos, la predicción de Camping es errada. El ministro presbiteriano, Ben Daniel, aseguró que Camping y sus seguidores han malinterpretado la Biblia, aunque para el fin del mundo le sabe a poesía.
«La historia de la iglesia cristiana está llena de historias de las grandes decepciones que se producen cuando las comunidades se engañan. Los verdaderos estudiosos de la Biblia sabemos que los pasajes bíblicos sobre el Fin de los Días son poesía, y no pretende que sean tomadas como predicciones reales”, aseguró Daniel a la revista Time.
Sin embargo Kevin Barney, quien es mormón indicó que antes de anticipar el fin del mundo, es mejor analizar qué pasó en casos anteriores. “Los mormones creen en la segunda venida, pero no como fin del mundo como tal. La posición oficial de la Iglesia siempre se ha basado en Mateo 24:36: «Pero de aquel día y hora nadie los sabe, ni aun los ángeles de los cielos, sino sólo el Padre», apuntó.
Daniel McKibben, pastor adventista si bien contradice la predicción del 21 de mayo, cree que la teoría del fin del mundo está cerca. «Hay muchos apicultores de todo el mundo que están perdiendo el 95% de sus abejas. Un científico muy famoso ha dicho que si perdemos las abejas, los seres humanos tienen cuatro años por delante».
Richard Dawkins, científico británico, aseguró que la Tierra terminará sólo cuando el Sol se quede sin hidrógeno, es decir, en unos cinco mil millones de años. “La ciencia sabe aproximadamente cuándo nuestra Tierra terminará, en unos cinco mil millones de años, el Sol se quedará sin hidrógeno, lo que perturbará su equilibrio autorregulado”.
“Antes de eso, podemos esperar un bombardeo de meteoritos o cometas peligrosamente grandes que lleguen a la Tierra. Cualquiera de estos impactos podrían ser suficiente para destruir toda la vida, como el que mató hace 65 millones de años a los dinosaurios”. «En el futuro cercano, es muy probable que la vida humana se extinga… Es el destino de casi todas las especies que han vivido».