BELO HORIZONTE, BRASIL.- Durante el programa de chat, presentado por la red de Super, el viernes (1), el tema fue tatuajes. El presentador Cássio Miranda recibió al pastor Bruno Barroso, de la Octava Iglesia Presbiteriana de Belo Horizonte. Barroso fue tatuador y cree que ese tipo de debate en las iglesias es «infantilidad» y «retrato del tiempo que la gente vive».
En su opinión, hay cuestiones más importantes para ser debatidas en la iglesia. Esto mostraría que «estamos discutiendo cosas estéticas, porque lo que es más profundo trae una demanda, un cambio de verdad».
En el caso de que los tatuajes no los influencien. Su preocupación es cómo este tema a menudo es superdimensionado, mientras que hay tantas cuestiones más importantes que se ignoran. «La Iglesia necesita ser el punto de más madurez en la sociedad», evalúa el pastor Barroso.
Durante el programa fueron respondidas a preguntas enviadas por los telespectadores. La mayoría parece entender que el uso del tatuaje no es «pecado». Se abordaron cuestiones conocidas como la prohibición, en el Antiguo Testamento, que prohíbe el marcado del cuerpo. Pero el pastor cree que ese tema es pasado y no edifica. «Hay que conversar sobre cuestiones más profundas y olvidar lados estéticos», reitera.
La única excepción hecha por él, es que la gente necesita pensar bien cuando eligen lo que se van a tatuar. «Poner atención y evitar simbologías de culto a muertos y dolor, así como las de cuño sexual», recomienda.