SUDÁN. – Dos pastores fueron acusados de ‘delitos contra la seguridad nacional’ en Sudán, a pesar de pocas pruebas, dando una indicación adicional de un aumento de la persecución contra los cristianos en el país. El próximo 14 de agosto ambos deben ser presentados en una audiencia citada por el tribunal de su país y podrían ser condenados a muerte.
Según Christian Solidarity Worldwide, los pastores Hassan Abduraheem y Kuwa Shamal fueron detenidos en diciembre de 2015 y de mayo de 2016, respectivamente. Los abogados de ambos habían expresado su preocupación por las condiciones en prisión, afirmando que ellos están en habitaciones pequeñas con poca ventilación y electricidad interrumpida.
La gama de delitos de los que son acusados incluye espionaje, difundir información falsa y promover una guerra contra el Estado. Sin embargo, la CSW dice que los cargos se refieren sólo por tratar de ayudar al estudiante Abdulmonem Abdumawla que también está siendo acusado igual que los pastores.
Recientemente, los estudiantes han sido blanco de las autoridades sudanesas y ha habido represión violenta por las manifestaciones. Abdumawla había recaudado dinero para un estudiante que sufrió quemaduras graves durante una manifestación. La iniciativa del chico parece haber llamado la atención de las autoridades.
CSW dijo que el pastor Abduraheem fue detenido por haber donado dinero para el cuidado de la salud de los estudiantes, mientras Shamal enfrenta cargos sólo por ser un amigo de Hassan Abduraheem.
Los arrestos siguen una serie de otras detenciones de cristianos en el país. El año pasado, los pastores Yat Michael y Peter Yen fueron puestos en libertad después de cargos similares que se presentaron en contra de ellos. Las detenciones injustas llamaron la atención de Amnistía Internacional y las instituciones cristianas que combaten la persecución religiosa de combate, por lo que han puesto en marcha campañas para que los pastores sean absueltos de los cargos.
Desde la secesión de Sudán del Sur en 2011, el presidente de Sudán, Omar al Bashir, ha pedido en repetidas ocasiones la ley islámica sea impuesta en el país. Actualmente está siendo acusado por la Corte Penal Internacional por genocidio en Darfur.
«Estamos profundamente preocupados por las graves acusaciones hechas contra el reverendo Hassan Abduraheem e o señor Abdulmonem Abdumawla, simplemente por tratar de ayudar con los gastos médicos de un amigo y en contra los pastores Kuwa Shamal y Abduraheem solo por el hecho de ser cristianos», dijo el presidente ejecutivo de CSW, Mervyn Thomas.
«Estos hombres inocentes se enfrentan ahora a la posibilidad de una sentencia de muerte sin evidencia que justifique un arresto, y mucho menos una condena, dada su escasez», agregó.