EE.UU., NUEVA YORK.- Un afroamericano visitó recientemente el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York. Al ver la exposición de las pinturas de Jesús, estás las catalogó de “racistas”, por lo que buscó un abogado y ahora está demandando a la ciudad de Nueva York y al museo porque en este lugar hay «violaciones a la Ley de Derechos Civiles». Él afirma que las pinturas exhibidas son «racialmente insensibles» pues todos retratan a Jesús como un hombre blanco.
De acuerdo con la denuncia presentada por Justin Renel Joseph en el Tribunal de Distrito de Nueva York, varias pinturas, incluyendo «La Sagrada Familia con ángeles» por Sebastiano Ricci, «La Resurrección» de Perugino, «El Milagro de los Panes y los Peces» por Tintoretto, y «La Crucifixión» de Francesco Granacci, son racistas porque representan a Jesucristo como un «ario», un término que fue usado por los nazis para representar una supuesta superioridad de la raza blanca.
Joseph, de 33 años, alega en la queja de que es un «hombre bi racial, parte judío y parte de ascendencia africana». También sostiene que como cristiano, sufrió «daños emocionales y psicológicos», cuando fue expuesto a las obras «racistas».
Todas estas pinturas fueron creadas en Europa en los siglos 16 y 18. Para el demandante, las imágenes son «antisemitas, racistas y ofensivas. Ellos son el robo cultural de una importante figura histórica y pública, incluso procedentes del pueblo hebreo que no es retratado como alguien de Medio Oriente”.
En el proceso, consta que al ver a Jesús como un hombre de cabello y piel clara, Joseph (que se define como negro) se sintió, entre otras cosas, «rechazado y no aceptado por la sociedad». Los méritos del caso aún no han sido juzgados, sino que representan un discurso de lo políticamente correcto.
Un portavoz del museo se negó a discutir el fondo de la demanda, pero hizo hincapié en que los marcos son importantes por su valor histórico y artístico. «Cuando fueron pintados, era típico de los artistas que retrataren temas con la misma identidad que el público local. Este fenómeno ocurre en muchas otras culturas», dijo Elyse Topalian al New York Post.
Además de la causa contra el museo, la ciudad de Nueva York, que ayuda a mantener el Museo Metropolitano, también está acusada de violar la Ley de Derechos Civiles, institucionalizando la defensa de la «supremacía blanca» con dinero público. También él quiere una indemnización porque trató de presentar una denuncia penal contra el museo en una estación de policía, pero la policía no la aceptó. Cuando él se descontroló fue arrestado por desacato y enviado a tratamiento psiquiátrico.