Ayer en Holanda finalizó la construcción de una réplica del Arca de Noé que inició en 1992 con un sueño. El holandés, Johan Huibers, es el creador de la moderna Arca de Noé, inaugurada en la localidad de Dordrecht.
La iniciativa de Huibers, surgió al tomar en cuenta que si Groenlandia se derritía en los próximos años a raíz del calentamiento global, como ya han pronosticado los expertos, Holanda quedaría completamente cubierta por el agua.
La inversión de esta embarcación, que hasta cuenta con una ventana superior para dejar volar a una paloma como se cuenta en la Biblia, es de 1, 6 millón de dólares, según informó “Fayer Wayer”.
La gigantesca estructura, de 135 metros de largo, 22,5 metros de ancho y 13,5 metros de altura (300, 50 y 30 codos, según se señala los capítulos 6 al 9 del libro del Génesis), en su primera etapa en el 2008 atrajo a 600.000 visitantes, que tuvieron que pagar cerca de $3.500 cada uno.
La réplica del Arca de Noé fue construida con madera de pino sueco (el original era con ciprés), quizás la única diferencia con la estructura que se describe en la Biblia, aunque la muestra tiene un plus extra, ya que incluye figuras a escala real de los animales que tienen que haber estado en el arca.
Huibers, espera que el arca se convierta en una verdadera atracción mundial en pocos días, puesto que planea llevar su «Arca de Noé» a recorrer las aguas del Río Támesis en Londres, durante los Juegos Olímpicos que parten este 27 de julio.
Fuente: Radio Programas del Perú y La Tercera