RETALHULEU, GUATEMALA.- Unos padres cristianos esperaron que su hija resucitara después de tres días de muerta. En clamor, la pareja junto con la familia y hasta la misma iglesia pidieron en oración a Dios que resucitara a Romelia Estefanía.
Su cuerpecito yacía en una mesa, con su muñeca favorita entre los brazos. Los padres de la Romelia no la querían enterrar porque se resistían a aceptar que había muerto sin siquiera cumplir dos años.
La pequeña había sido traslada al hospital un fin de semana (domingo 7) con vómitos y fiebre. Horas después, los médicos les informaron que había fallecido. Incrédulos los padres, regresaron a casa con el cuerpo de su hijita asegurando que todavía seguía viva y que tenía signos vitales.
Sin embargo, las autoridades tuvieron que intervenir para impedir que el cuerpo entrara en estado de descomposición en la casa donde permanecía rodeado por decenas de personas.
Rumbo al cementerio, el pastor de la iglesia habló al oído del cadáver de la Romelia, dándoles ordenes al demonio que libera el cuerpo de la pequeña. “En el nombre de Jesús vas a soltar este cuerpo, oídme bien en el nombre de Jesús de Nazaret, vas soltando este cuerpo que no te pertenece, no te pertenece, le pertenece a Dios” dijo el pastor. Incluso, durante el entierro, los padres no perdieron la esperanza de que su niña resucitara.
Según Al Rojo Vivo, el acta de defunción indica que la niña murió por una perdida severa de sangre cuando la trasladaron de un hospital a otro.
