ROMA.- La visita del Papa Francisco a la Parroquia de San Pablo de la Cruz, en el sur de Roma, tuvo gran repercusión. El motivo fue la respuesta inesperada del pontífice al niño Emanuele, de 8 años.
Antes de rezar la misa, Francisco decidió escuchar cuestionamientos de niños. Emanuele entonces preguntó: «Poco tiempo atrás, mi padre murió. Él era ateo, pero tuvo a todos sus cuatro hijos bautizados. Él era un buen hombre. ¿Está él en el cielo, Papa?’.
La respuesta del líder máximo de la Iglesia Católica fue abrazar y consolar al niño durante algunos minutos. Después, afirmó a los presentes: «Para que sus hijos pudieran decir que era un buen hombre, debe haber dado un bello testimonio a sus hijos».
También afirmó: «Aquel hombre no tenía el don de la fe, él no era creyente, pero él tenía sus hijos bautizados. (…) quien dice quién va al cielo es Dios, pero cómo está el corazón de Dios ante un padre así. Un corazón de papá. Dios tiene el corazón de un padre. Y ante un padre, no creyente, que fue capaz de bautizar a sus hijos y dar esa bravura a sus hijos, ¿ustedes creen que Dios sería capaz de dejarlo lejos? «.
Francisco destacó el coraje del niño en hablar en público sobre la duda que le afligía. «… deberíamos llorar como Emanuele cuando tenemos un dolor como él tiene en su corazón. Él lloró por su padre y tuvo el coraje de hacer eso delante de nosotros, porque en su corazón hay amor por su padre», aseguró.
Para el pontífice argentino dijo: «Es un hermoso testimonio del hijo que heredó la fuerza de su padre y, también, tuvo el coraje de llorar delante de todos nosotros. Si aquel hombre era capaz de criar hijos así, es verdad, él fue un buen hombre».
Dirigiéndose a los fieles presentes, Francisco preguntó: «Dios abandona a sus hijos cuando son buenos?», A lo que el público respondió que «no». Entonces miró al niño y le aseguró: «Mira Emanuele, esta es la respuesta. Dios ciertamente estaba orgulloso de tu padre, porque es más fácil ser un creyente, bautizar a los niños, bautizar niños, que bautizarlos siendo incrédulo. Ciertamente eso agradó mucho a Dios. Habla con tu padre, reza por tu padre. Gracias, Emanuele, por tu coraje».
No fue la primera vez
Contrariamente a las enseñanzas de la Biblia y de la doctrina católica, en otras oportunidades actuales el Papa había dicho que los ateos podrían «ir al cielo». En 2013, durante una homilía, afirmó: «El Señor nos redimió a todos nosotros, con la Sangre de Cristo, a todos nosotros, no sólo a los católicos. ¡Todo el mundo! «Padre, ¿los ateos?» Incluso los ateos. ¡Todo el mundo!».
Dos años después de hablar con el diario italiano ‘La Repubblica’, Francisco habló sobre el perdón de Dios, diciendo que se extendería «incluso para aquellos que no creen en su existencia».
[ Fuente: Catholic Herald ]
