ANTÁRTIDA.- El descubrimiento de árboles fosilizados por geólogos que trabajaban en una investigación en la Antártida aportó evidencias que refuerzan la narración bíblica en Génesis acerca del diluvio.
La investigación fue hecha por los geólogos Erik Gulbranson y John Isbell, de la Universidad de Wisconsin-Milwaukee, en Estados Unidos. En total, recogieron fragmentos de trece árboles y descubrieron que los fósiles poseen 260 millones de años.
«Los árboles fueron encontrados en los Montes Trans antárticos de la Antártida e incluyen una mezcla de árboles de hojas perennes, árboles deciduos y ginkgos. Este hallazgo no debería ser una sorpresa para aquellos que toman el Génesis como historia literal», dijo el geólogo Tim Clarey en un artículo para el sitio del Instituto para la Investigación de la Creación de (ICR).
Según la información del portal de Christian News, el descubrimiento de los árboles viejos indica que eran parte del final del período Pérmico, antes de los primeros dinosaurios: «Este bosque es una visión de la vida antes de la extinción, que nos ayuda a entender lo que causó el evento», dijo Erik Gulbranson.
«El período Pérmico terminó hace 251 millones de años en la mayor extinción masiva de la historia, ya que la Tierra se transformó rápidamente de una heladera para las condiciones de invernadero. Más del 90% de las especies en la Tierra desaparecieron, incluyendo los bosques polares», contextualiza el informe de la investigación, publicado por la Universidad de Wisconsin-Milwaukee.
Aunque no existe consenso en el medio científico acerca de la causa del evento de extinción al final del período Pérmico, Clarey -que es Ph.D en geología por la Western Michigan University- afirmó que el reciente descubrimiento de Gulbranson e Isbell refuerza las evidencias de que el catalizador del cambio fue el diluvio descrito en Génesis.
«La Biblia describe claramente una inundación global que afectó a todas las masas terrestres – ¿por qué la Antártida debería ser una excepción?», cuestionó Clarey.
Los árboles no pueden sobrevivir al clima frío que define la Antártida actualmente. De esta forma, el descubrimiento de los fósiles indica que las condiciones climáticas del continente eran más cálidas y húmedas en el pasado. Esta evidencia se alía con la visión de que el clima de la Tierra era más caliente y más ameno antes del diluvio.
La condición de los fósiles de los árboles preservados con rasgos de proteínas y aminoácidos aún intactos- sigue teniendo sentido si los árboles fueron alcanzados por el diluvio unos miles de años atrás, observó Clarey. «¿Cómo las proteínas y los aminoácidos originales podrían sobrevivir por millones de años? La comunidad de ciencia secular no tiene respuestas viables para explicar hallazgos notables como éstos», prosiguió.
Los responsables del descubrimiento afirman, en su informe, que creen que los árboles fosilizados recién descubiertos tienen millones de años, pero Clarey dice que las evidencias «cuentan una historia diferente y mucho más reciente, que encaja en el relato bíblico de una inundación global hace sólo miles de años».
«Estos árboles fueron enterrados rápidamente durante el diluvio global descrito en Génesis. Los animales y plantas tropicales fueron atrapados y rápidamente enterrados en las cenizas, lodos y arena que los soterraron en este evento cataclísmico. Estos fósiles nos recuerdan que la palabra de Dios es verdad», concluyó el geólogo cristiano.
[ Fuente: Christian News, ICR ]
