GEORGICA, EE.UU.- La mayoría de los jóvenes sueñan un día entrar en la universidad, pero debido a los altos costos con la mensualidad y también gastos durante el curso, gran parte de ellos acaban desistiendo de los estudios por dificultades financieras. Por su parte, una adolescente de Macon, en Georgia, Estados Unidos, tuvo una idea inusitada para resolver sus problemas.
Mykehia Curry, de 18 años, decidió escribir una carta a Dios pidiendo ayuda para conseguir pagar su universidad. Ella es la única persona de su familia que tuvo acceso al campus universitario y completar el curso, es más que un sueño de realización personal, pero también de mejores condiciones de vida.
Ella hizo préstamos y entró en en Albany State University, pero la deuda se hizo demasiado pesada y Curry no tuvo para pagar todos los gastos, fue cuando oró a Dios pidiendo una solución.
«Escribí una carta que decía: ‘Dios, por favor, ayúdame a conseguir el resto de mis cosas para la universidad’, dijo Curry. «Entonces dije: ‘Amén. Yo te amo, Dios, y yo escribí mi nombre y número.
Ella explicó que tomó la carta y la ató en tres globos de aire, soltándolos enseguida. La carta con su pedido viajó por 24 km en el aire, atada a los globos. Curry no tenía la menor idea donde los globos podrían caer, pero ella estaba segura de que dondequiera que fuera, sería por permiso de Dios.
Respuesta de oración
Los globos se detuvieron en una ciudad vecina, en el lugar exacto donde un pastor llamado Jerome Jones estaba trabajando en otro trabajo, en Georgia Power dijo la emisora WMGT-TV, filial de la Red NBC, que los globos cayeron prácticamente en sus manos.
«Vi algo brillante y flotante, así que fui hasta allí y lo cogí y fueron globos con una nota atada a él. Ellos flotaron toda la noche y se posaron bien en mis manos. Prácticamente Quiero decir», cuenta el pastor.
Le puede interesar: Militares toman iglesias e interrumpen misiones en Camerún
El pastor entonces llamó al número de Curry y le dijo que le ayudaría a pagar la universidad. Además, él y otro miembro de la iglesia compraron una nevera y un colchón para el nuevo cuarto de la estudiante donde vivía.
El caso llegó al conocimiento de la prensa y el testimonio de amor y solidaridad al prójimo reflejó el carácter de Jesucristo en la vida del pastor. Curry dijo estar «sorprendida» con el desenlace de su oración y su familia está muy agradecida.
«Eso sólo permite que usted sepa que todavía hay gente buena por ahí», dijo la madre de Curry, Katina Mitchell.
[Fuente: NBC ]