Pastores cautelosos por el crecimiento del G12 en la Isla

Los diferentes líderes cristianos se muestran cautelosos ante el sistema del G12, que mezcla nuevos principios teológicos. Mientras unas iglesias han implantado este modelo, otras advierten sobre las profundas divisiones teológicas y jerárquicas que pueda causar en las diferentes denominaciones. «Se están diciendo muchas cosas del movimiento sin pruebas. Pero no nos conviene. Es una metodología, no una religión. En términos teológicos, dividen porque Jesucristo perdona nuestros pecados, pero ellos sostienen que hay pecados que los traen nuestros antepasados», sostuvo el presidente de la Fraternidad Pentecostal de Puerto Rico, Ángel Marcial.

El modelo G12, ideado y fundado por el pastor colombiano César Castellanos, se ha convertido en el tema del momento de la comunidad pastoral de Puerto Rico. El hecho de que la semana pasada se haya celebrado la tercera convención anual del grupo aquí evidencia, para algunos, la receptividad que ha tenido el «movimiento», término que es rechazado por la mayoría de sus seguidores.

No obstante, algunas versiones sin confirmar aseguran que el sistema celular del modelo ejerce un control excesivo sobre sus integrantes. También se alega que los dirigentes o «mentores» de las células podrían tener demasiada injerencia sobre asuntos muy privados y sensitivos de sus feligreses.

El punto más controversial de su dogma, para muchos religiosos es la maldición generacional, la cual se cancela durante un acto conocido como «encuentro», aunque también su estructura ha sido objeto de otras críticas dirigidas a salvaguardar la autoridad de las instituciones tradicionales.

«Esto se puede convertir en una estructura dentro de otra estructura y podrían chocar con las jerarquías de las iglesias», indicó Marcial. Otros rumores que giran en torno a prácticas espiritistas de los seguidores han sido rechazados rotundamente por miembros de G12. El modelo sí adopta estrategias para el desarrollo personal, como una «escalera del éxito» que algunos religiosos comparan con la literatura de autoayuda. El mismo se intenta desarrollar a base de las escrituras bíblicas.

«Aun cuando no estoy de acuerdo con el modelo, no encuentro reales y verdaderas las acusaciones que se hacen en contra de las personas que lo practican en Puerto Rico. Eventualmente espero que los líderes conciliares tengan la oportunidad de sentarse con los patrocinadores del modelo para llegar a acuerdos que sean saludables», sostuvo el reverendo Moisés Román, productor del programa Respuestas, el cual se transmite por la «Cadena del Milagro», Canal 68.

A pesar de su estructura piramidal, éste rechazó que fuese un esquema comparable con los diferentes negocios que tienen la misma estructura. «Aquí no hay ningún producto que se vende o compra. Creo que el defecto del sistema piramidal (en este contexto) está orientado más al distanciamiento entre los líderes y su feligresía. Creo que los líderes nunca deben estar distanciados de su comunidad», indicó el pastor.

La Iglesia Cristiana (Discípulos de Cristo) en Puerto Rico tampoco patrocina la aplicación del modelo G12 y puso en tela de juicio el propio debate público que ha suscitado su implantación.

«Plantean que su estrategia es la mejor y en ese sentido nosotros tomamos distancia de cualquier afirmación categórica. Cualquier gestión que intente crear divisiones y polarización, a todas luces, no está cumpliendo con la edificación (del feligrés)», indicó el pastor general de la Iglesia Discípulos de Cristo, Esteban González Doble.

El reverendo también cuestionó que el modelo se haya originado por inspiración divina, como sostiene su fundador, el pastor colombiano César Castellanos, y que sus sermones se traduzcan a la «revelación de Dios». También criticó que el modelo haga una «crítica abierta a los otros sistemas establecidos» y que al seguidor «se le anule la capacidad de tomar decisiones formadas».

Primera Hora

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