NOTICIACRISTIANA.COM – El capítulo 5 del libro de Éxodo, relata la negociación de Dios a través de Moisés con el faraón de Egipto, para liberar a Israel. Pero, ¿se ha preguntado qué significado tiene para la iglesia esa negociación? que se relata en el segundo libro del Pentateuco.
El Dr. Lucas Márquez, expone que el relato de Éxodo 5:1-9, sobre la exigencia de Dios y resistencia del faraón, es un significado de lucha de poderes que glorifica la última batalla de la iglesia. Además, indica que Israel, es el símbolo del hombre transformado, porque Dios desde ese momento, los ve como una nación de reyes y sacerdotes.
“En Éxodo, Dios se reveló como Jehová a Moisés, el Dios del pacto, él que existe eternamente. Y le pide que en la negociación con el faraón, diga que es enviado por Jehová. El Dios de Israel, utiliza un título que indica, que es el Dios de un pueblo transformado. Es decir, aunque Israel era esclavo en Egipto, para Dios ya eran reyes y sacerdotes”, explica Márquez.
“Después Moisés y Aarón entraron a la presencia de Faraón y le dijeron: Jehová el Dios de Israel dice así: Deja ir a mi pueblo a celebrarme fiesta en el desierto”.
Éxodo 5:1
Dios no ve lo físico
Agrega, que la iglesia es gloriosa sin manchas y arrugas, pero si la miramos con ojos físicos no la percibimos de esa forma. En este sentido, debemos tener presente que Dios ve lo que no es, es decir, no ve nuestra condición actual, sino como el producto final que desea lograr en cada uno de nosotros.
“Por ejemplo Dios vio en Moisés el libertador de una nación, el creador de los primeros cinco libros de La Biblia. Pedro vio en el apóstol Pablo un asesino en serie, Dios vio a un apóstol escogido del vientre de la madres que escribiría más de 14 epístolas, más de la mitad de Nuevo Testamento, convertidas en una bendición para la iglesia. Dios nunca consulta tu pasado para diseñar tu futuro, no ve tus limitaciones, porque sabe lo que ha puesto dentro de ti. No olvides que Dios coloca grandeza dentro de ti”.
Lucas Márquez
Indica, que cuando Dios manda a Moisés a la negociación delante de faraón, es para decirle que no hay nada que pueda hacer en contra del pueblo hebreo, quienes al cruzar el río Jordán renunciarían a su pasado, para ser parte de una nueva creación.
Cruzadores
“La palabra hebreo en ese idioma, significa un cruzador de río. El término hebreo es quien cruzó, es decir definido por una experiencia, de pasar de un lado a otro. Por lo tanto, nosotros somos hebreos porque cruzamos de Adán a Cristo, de la vieja creación a la nueva, de la carne al espíritu, cruzamos del viejo al nuevo pacto, de la ley a la gracia. Entonces, somos creadores, porque ya no estamos en el lugar de antes”, enfatiza Márquez.
En consecuencia, destaca que cuando Dios manifiesta, que no desea que su pueblo sea esclavo, que quiere que le celebre fiesta, nos da entender que el mundo para quienes tienen a Dios en su corazón, no es su hogar, porque cruzaron de la vieja a la nueva creación.
“La expresión celebrar fiesta, en Éxodo, debe entenderse que Dios está feliz. Para nosotros la fiesta y para Dios el sacrificio. Siempre debemos unir estos dos términos. Mientras celebramos fiestas y disfrutemos a Cristo, más sacrificios agradables presentemos a Dios”, acotó Márquez.
“Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional” .
Romanos 12:1
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