NOTICIACRISTIANA.COM.- En Kirguistán, un musulmán gritó «Allahu Akbar» (Dios es grande) y de repente apuñaló a un anciano cristiano que estaba en la calle frente a la mezquita.
Más tarde el radical confesó a la policía que cometió el crimen porque necesitaba el permiso de Alá para entrar al cielo. Además, mencionó que todavía necesitaba matar a dos kafir más (término árabe utilizado para definir a una persona infiel).
Según la policía, hace dos años el musulmán pasó unos tres meses en una región donde el islam es extremo, y desde entonces se ha convertido en un islamista radical, informa Portas Abertas.
Los cristianos de la región están asustados por el incidente. El juicio del musulmán aún no se ha llevado a cabo, pero una comisión médica le ha diagnosticado un trastorno mental.
Kirguistán ocupa el puesto 55 en la lista 2021 de países observados por Open Doors. Aunque es uno de los países menos opresivos de Asia Central, es un lugar inseguro para cualquiera que quiera seguir a Cristo.
Los cristianos nativos ex musulmanes son los más afectados por la persecución. Algunos son encerrados durante largos períodos por sus familias y golpeados. Los maestros islámicos predican contra ellos y pueden hacer que los expulsen de sus comunidades. La iglesia del país se siente vulnerable.
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