Juan Carlos Fernández “Rabito”, es uno de los mas destacados cantautores contemporáneos. Pionero en el uso de la radio y la televisión comercial para difundir la música cristiana. A su vez, un exigente autocríiico, por conseguir la excelencia en cada uno de sus proyectos. Su experiencia con los medios, se inicia tres décadas atrás, cuando ascendió a la cúspide de su carrera artística, impactando a toda Latinoamérica con sus solicitados temas.
Al conocer a Jesús, mantuvo el mismo profesionalismo que ahora reclama para el uso de los medios cristianos. Y no lo hace porque quiere. Dios le ha dado la encomienda y el no puede callarlo, así le reste popularidad con algunas personas. “Se que un día, el Señor me pedirá cuentas si no comparto esto”, nos dice con profunda convicción. Rabito, en esta entrevista detalla puntos álgidos en cuanto a la forma como los medios de comunicación cristianos están operando.
¿Como has visto que han evolucionado los medios cristianos en los últimos años? Hemos empezado a aparecer en muchas radios. Lamentablemente, el nivel de producción en algunos de ellos, es extremadamente bajo. Además, algunos piden dinero de manera inadecuada para mantenerse en el aire, y eso desfigura la imagen de lo que es un medio cristiano. La parte buena es que existe una minoría, que esta haciendo las cosas con un buen concepto. Hay radios que hacen buen trabajo en la frontera con México y otras en el resto del pais. Pero yo tengo una autocrítica fuerte. Por lo mismo, trato de ser muy profesional en las cosas que hago para el Señor, porque creo que Dios lo demanda así. Nuestro pueblo tiene que prepararse enviando gente a estudiar. Hay falta de conciencia de que necesitamos un profesionalismo mas profundo.
El 80% de la programación cristiana son predicaciones grabadas en la Iglesia ¿Qué opinas de esto? Algunos se basan en la Biblia que dice “La Palabra nunca vuelve vacía”. Pues definitivamente, la Palabra nunca vuelve vacía porque tiene un peso propio. No necesita de mí; ella hace su propio trabajo conmigo o sin mi. Pero cuando grabamos un programa de televisión en la iglesia, utilizamos terminología diferente, difícil de entender por el ciudadano común. Al escuchar esto, la gente termina cambiando el dial porque no saben el significado de lo que están escuchando.
¿Justifica entonces pagar el alto costo de los medios? Un alma justifica cualquier precio. Lo que esta en juego es como hacer para que mas personas se queden escuchando el mensaje… y que nos vuelvan a sintonizar.
¿Seria un buen consejo para quienes están invirtiendo mucho dinero en programas, reconsideren su inversión? El costo del aire es caro y hay que pagarlo. Si la gente no te escucha ni te apoya es mejor parar. Porque no se debe torcer la Palabra, para pagar la cuota del fin de mes. No es bíblico.
¿Quien tuerce la Palabra para conseguir dinero, representa al pueblo evangélico?
No. Los que tuercen la Palabra no representan al pueblo evangélico, la Palabra no se puede torcer. Esta prohibido por Dios alterar algo en su Palabra. Cuando se manipula el contenido de la Biblia para juntar dinero, ahí se confundieron, ahí dejaron de representar a todas las personas que trabajan para Dios de una manera honesta.
¿Entonces que hacer cuando el medio no puede sostenerse? Cuando el medio no puede sostener a si mismo, yo me pregunto si fue abierto por voluntad de Dios o por voluntad de la persona que lo hizo. Porque Dios nos hace las cosas a medias. El nunca deja nada a la mitad. Dios sigue siendo Dios.
¿Sabes de alguna radio que ha desaparecido? Si. Un hombre aquí en California, hace unos días, viendo que la radio cristiana no le daba dinero, la ha convertido en una radio sexual. Yo entiendo que a esa persona no le importan las cosas de fe. Pero el cambio el formato de la radio porque no era negocio. Mi pregunta es ¿por que no fuimos negocio para esta persona? ¿Por que no tuvimos rating en esta radio?
¿Que fue lo que fallo? Yo creo que falto la gracia de Dios, la ética y el profesionalismo. Debemos prepararnos para hablar de manera inteligente y no emocionalmente.
¿Cual es tu aporte final? En los medios debemos de preparar a nuestra gente. Buscar a las personas más idóneas. Hacer un compromiso serio con quienes van a estar manejando el medio. Dios nos dice que antes de ejecutar un proyecto, debemos hacer los cálculos. Necesitamos radios competitivas, sanas, que hagan programas entretenidos o instructivos, pero que dejen un mensaje claro. Por supuesto de manera profesional, porque cada día, la palabra profesional pareciera que esta perdiendo mas peso en los medios cristianos. Si hay una radio inteligente y con gracia de Dios, el público donará el dinero necesario.
Por Jaime Lázaro.-
Agencia Orbita